EL NIDO DEL TIGRE

Suspendidos entre la niebla y desafiando al vacío, emergen los edificios de inconfundible color blanco, grana y oro que conforman el monasterio, sólo se puede acceder a ellos caminando por senderos de pinos himaláyicos que acunan banderas de oración y campanas cuyo tintineo nos muestra el camino hasta uno de los emplazamientos más bellos del mundo.

La peregrinación por la empinada montaña dura cerca de 3 horas, se requiere un esfuerzo físico importante, pero la recompensa espiritual que obtendrás al llegar, hará que te repongas rápidamente, mientras se apodera de ti una serenidad fuera de lo común que emana de cada roca de este sagrado lugar.

El monasterio consta de 4 edificios interconectados por escaleras, la rueda de oración se encuentra en el patio del templo y cada mañana a las 4 a.m., los monjes lo rotan para marcar el comienzo de un nuevo día.

En su interior el ambiente es casi irreal, impresiona su lujosa belleza, su cúpula dorada y luces parpadeantes iluminando a sus ídolos dorados y a los monjes que rezan en el lugar —es una imagen que difícilmente podrás olvidar. En la sala de los Mil Budas, esculpida en la roca, se encuentra la estatua de un tigre, símbolo de este monasterio y leyenda que dio origen a su nombre.